lunes, 1 de abril de 2013

¡No sea payaso Doctor!

Iba a iniciar el post con la frase "En aquel mes de noviembre de 2012"... Pero me pareció de lo más trillado y al mismo tiempo visto por lo  que me arrepentí, como en el momento en que por azares del destino esto de las ventas no se dío como debiera derivando en estar yendo a diversas plazas comerciales a hacer lo que menos me gusta y es "pararme a ver como pasa la gente".

Entre esas cuestiones y gracias a un amigo y compañero del trabajo se tuvo que poner un stand en SEDESOL, en todas sus instalaciones durante varios días, debido a que había una feria de promociones y servicios para los empleados, había otras empresas automotrices, un par de empresas se seguros y... Varias empresas de servicios Funerarios, estaban García López, Gayoso, Panteón Frances y más que ahora no recuerdo y que ni quiero acordarme.



Al verme ahí, entre mi depresión, estrés y el estar ahí parado sin salario, ni prestaciones y ni un peso en la cuenta de banco, no dude en llevarme la tablet (Android que si me gusta porque detesto las IPADS) en la misma estuve leyendo varios libros en PDF y Epub, entre ellos estaba "Los hermosos Gitanos" de Sergio Zurita.

Durante mi lectura podía escuchar los comentarios de los vendedores de pompas fúnebres y el mejor argumento que escuche fue: "es algo de lo que no queremos saber, pero que en algún momento vamos a necesitar"; no dude en pensar creo que estoy en el rubro equivocado "dejan más lana los que nacen y los que se mueren", sin embargo y debido a mi carente gana de tener que ver con la muerte ese pensamiento se esfumó en menos de 2 segundos.

Mientras leía la historia del Psiquiata Gabriel Echenique no podía dejar de ligar a los vendedores de ataudes y accesorios mortuorios con la frase "No vaya a ser que me muera y me publiquen esto como homenaje póstumo" que está casi al inicio del libro, de pronto el personaje del Echenique en mi mente tenía dejos del mismo Zurita y otras veces de algunas otras personas que he conocido en mi larga o corta existencia en especial a José Arrieta mi gran amigo por lo que por un momento me imaginé a mi siendo un Grete que ya no encuentra sentido en lo que hace y siendo psicoanalizado por un Echenique que más bien era victima de mis propias preguntas.poco me faltó para comenzar a declamar la obra de teatro mientras los señores de enfrente o a mi lado ofrecían "un espacio donde sus restos o los de su familiar pueden descansar".

Entre todo esto y por la lectura no pude dejar de pensar en que lo importante de esta vida es ser uno mismo, dejar de buscar algo en donde no te sientes a gusto y establecer prioridades además de gustos propios y no los que me estaba dejando el trabajo; mi nivel de estrés cayo en ese momento y de pronto todo se hizo más sencillo porque dejé de caer en el juego de las ventas en que muchos asesores están inmersos, de pronto mi visión se confundió con las ultimas apariciones en la obra de Echenique frente a los doctores en el congreso de medicina, lo cual me relajó muchísimo y no dude en agradecerle mentalmente a Sergio Zurita por la enseñanza que me dio su obra.

En este momento ya más relajado y claro aún atenido a las ventas mi mente piensa en varios proyectos que me gustaría compartir con amigos, el trabajar en lo que me gusta que es la radio y por qué no (rayos ahora ya soné al Chicharo Hernández) hasta trabajar con el loco de la obra de teatro que me hizo poner este post, esta última posibilidad es nada o casi imposible pero en el fondo de mi ser hay algo que hace pensar que pudiera ser realidad.

Por ahora ya termino este post mientras simulo que trabajo en la agencia pero mi mente y mi alma van a algo más grande que sólo vender un auto, busco ese algo que me dé una verdadera satisfacción.

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